LA UNIÓN DE TRANSPORTISTAS DEL ESTADO DE PUEBLA CON EL PARO NACIONAL DE MUJERES CONTRA LOS DEPREDADORES SOCIALES QUE LAS VIOLENTAN.

Unirnos a la novedosa iniciativa del paro nacional de mujeres el próximo 9 de marzo de 2020, tiene un simbolismo muy contundente. Significa la construcción de una sola fuerza en contra de los depredadores sociales; los transportistas rechazamos, enérgicamente, las conductas de seres despreciables que están lastimando a México en lo más profundo: el maltrato a las mujeres, y el mínimo respeto a la vida.
Atentar contra ellas, en el sentido que sea, no sólo es agredir a una parte del genero humano; también es agredir a una madre, a una hija, o una hermana; hechos tan deplorables con los que se termina violentando a toda la familia y a la sociedad entera. Entre la gran indignación, condenamos el deplorable crimen cometido en contra de tres universitarios y un trabajador del volante, y manifestamos nuestra más amplia solidaridad con estas instituciones universitarias, sumándonos a su justa demanda de castigo a los responsables que perpetraron estos crímenes bestiales.
Tenemos muy claro, que las conductas depredadoras contra las mujeres, tanto en el aspecto físico como en el emocional cuando se les ultraja en su dignidad, no se pueden concebir como conductas humanas por lo que se les debe castigar, con todo rigor, al margen de cualquier derecho humano. No puede haber derechos humanos para conductas inhumanas.
Estamos seguros, y lo celebramos, que el día 9 de marzo de 2020 con la fuerza de su ausencia: las mujeres de México se harán notar como nunca antes lo habían hecho. Sin duda, ese día será una lección de vida para el género humano, desde México para el mundo. Al paro de mujeres ya nadie lo para; el paro viene y nadie lo detiene.
La Unión de Transportistas del Estado de Puebla, celebra, apoya, y se une al paro de las mujeres, que con su ausencia se harán presentes.

EL 9 NADIE SE MUEVE
H. Puebla de Z.; a 26 de febrero de 2020.
Por la Unión de Transportistas del Estado
Arturo Loyola González
Samuel Méndez Díaz

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *